Ayer fue un día a la vez genial y a la vez tristón...
Genial porque lo pasamos muy bien con Jonás en el ratito en que estuvimos juntos después del cole y hasta la hora que yo tenía que irme al ensayo de coral para la cantata.
Por la mañana, Jonás, Aída y la Gom se fueron a dar una vuelta. Visitaron nuestros comercios y calles predilectas, me vinieron a buscar al cole, le pude presentar a Jonás a todas y todos...
Fredy nos preparó otra opípara y deliciosa comilona, que rematamos con los postres que compró Aída: un pastel de tres chocolates y helados artesanos surtidos de la pastissería Martí.
Estuvimos jugando un ratito largo... (nota: tenemos ahí esa pantalla que era la de la compu vieja porque el otro día le regalamos una nueva a la Gom y la tenemos ahí mientras la llevamos al punto de reciclaje).
Y entretanto, Aída, Fredy y la Gom comieron y estuvieron hablando de comidas y cosas del mundo.
(Se hicieron más fotos...of course, ¡¡qué paliza ellas y sus cámaras!!) ;-)
Y al final llegó el peor momento, además con mala noticia incluida, porque creíamos que el ensayo era en el Bolet, que queda cerca de la estación de bus, y me podrían ir a buscar y acompañarlos a la estación...Pero al final resulta que nos llamó la mamá de Irene y nos dijo que el ensayo lo habían cambiado de sitio y era en el auditorio -que queda al otro lado del pueblo- y tocaría despedirse a las 5 en vez de las 8.
Nos pusimos los dos supertristes. Jonás no quería irse y yo no quería que se fuera...
Pero...bueno...nos dimos un abrazo bien fuertote y prometimos que muy muy muy pronto nos volvemos a ver: aquí, en Sitges o en Zaragoza.
En el ratito que quedaba, Jonás, Aída y la Gom se fueron a pasear un poquito, a comprar unas chuches para Jonás...Él se compró una bolsa de ganchitos y para mí me compraron una bolsa de pelotazos, así como para una pequeña despedida simbólica. ;-)
Después vinieron a casa y se despidieron de Fredy...
Y para la estación.
Como Jonás había caminado un montón y estaba muy cansadito, 'desempolvamos' mi carrito y Jonás fue sentado como un duque sobre ruedas hasta allí...
A las ocho salió el autobús y Jonás y Aída se fueron para Sitges, donde les estaba esperando la mamá de Aída, Pilar.
Cuando llegué, me encontré las cosas con que habíamos estado jugando y me puse a llorar, también había estado muy tristona durante el ensayo pero...bueno, la Gom me decía que me quede pensando en que lo hemos pasado bomba y que ahora Jonás y yo somos todavía más amigos que antes y nos queremos más. ¡Y es verdad!
¡¡¡Pero la próxima vez vamos a pasarnos juntos una semana entera o treinta días!!! ¡Aunque nos acribillen a fotos! ¿A que sí, Jonás?
UN BESO ENORME A LOS DOS. ¡¡Lo hemos pasado bomba con vosotros y el tiempo ha parecido muy cortito!! :-)
No hay comentarios:
Publicar un comentario