Esta semana, Francis nos ha enseñado que se ha escogido un spot nuevo para el siestón de después de cenar: encima del microondas.
Le ha descubierto el potencial que tiene para servir de sofá-cama y debe ser comodísimo, porque se sube y no hay quien le haga entender que 'ahí' no es un sitio para dormir... Viva la anarquía doméstica, Franki.
Le gusta estar fresquito en el cuarto de baño...
Ahora ya ha aprendido a entrar y salir de la bañera.
Si te vas a duchar, te tienes que asomar, no sea que esté ahí y lo remojes cuando abras el grifo.
Le hemos pedido si nos dejaba sacarle una foto mejor en el lavamanos pero no ha querido, se ha dado la vuelta rápido, ha bajado y con el impulso se ha llevado por delante el frasquito de elixir bucal. (Pero se ha quedado al lado para comprobar que no hubiera habido estropicio).
Ayer hablamos con Amàlia y nos contó que el hermanito de Francis que se ha quedado a vivir en Anglesola se le parece mucho.
A ver si nos manda una foto y la ponemos :-)
Y dos fotillos más.
Ahí lo tenemos anoche, acostado en el escritorio de la Gom mientras ella trabajaba...
...y hace un momentito, mirando cómo caía un chaparrón matinal...
(Por cierto, el poster de Sheldon que ya tenía un par de remiendos no sobrevivió al último ataque francisquico...Y un frasquito mío de perfume también ha pasado a mejor vida, accidentalmente)
No hay comentarios:
Publicar un comentario