Fredy y yo somos supercomputeiros. El ordenador y sus accesorios no tienen secretos para nosotros.
Estamos en fase de renovar toda la tecnología doméstica y ayer Fredy vino con uno de los accesorios que más ganas teníamos de tener: un pantallón enorme para el ordenador donde él trabaja y yo veo mis pelis y series.
Se ve de perlas, las imágenes enormes y muy claras. ¡Es como una tele!
Anoche nada más llegar a casa Fredy lo instaló y lo inauguramos. ¡Un momentazo!
El monitor viejo se lo hemos dado a La Gómez, porque el suyo era del ordenador que compramos hace un mogollón de tiempo (¡lo compraron cuando yo era bebé!) y se le veía todo oscuro.
Lo que pasa es que me da pena que haya que tirar esa pantalla vieja, porque yo le tengo cariño. Le había puesto un montón de pegatinas...
Espero que la dejen aquí en casa de recuerdo... :-)
Del día en Barcelona -que fue a ver una cosa de arquitectura que era algo rollo, por lo visto-, Fredy además se volvió con unos pendrive que daban de promoción y a mí me vienen de perlas para copiarme mis pelis y llevármelas para ver en la tele...aunque la verdad es que me parece que ahora no le voy a hacer ni caso, porque ¡esta pantalla es mejor! ;-)
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