Ahora que ya está encima la fecha de partir me doy cuenta de que voy a echar mucho de menos al trastete del Franki estos días que estaré fuera.
Sus maullidines, que me venga a despertar, buscarlo a ver dónde se ha metido cuando llevas rato sin verlo, achucharlo, encontrártelo echándose un siestazo, que salga a buscarte a la puerta cuando llegas...
Esta semana no ha estado muy fotero el Francis.
Hay veces que, cuando oye el clic y se da cuenta que le estás haciendo fotos, se queda quietecito para que le hagas dos o tres pero esta semana salía disparado para esconderse o - como pasó con el día que vino Hèctor- se empeña en mirar para otro sitio y moverse ( y eso ni con la función 'mascotas' de la cámara lo puedes arreglar), pero salió este primer plano (hecho desde lejos) donde se le ve aún chiquitín y con esa cara de espabilado guapetón que tiene (montón de piropos, pero es que lo queremos mucho mucho).
Ésta de aquí abajo es de esas fotos que no han logrado salir bien pero ha sido muy gracioso el momento, porque era Franki al lado de todos mis gatitos de juguete (en plan ET cuando se camuflaba en el armario de Elliot). :-)
Dice Fredy que con lo mayor que se está poniendo pronto ya no va a poder meterse por esos rinconcillos que le gusta, pero que seguro que va a ir inventando locuras nuevas...
¡Te voy a extrañar, Francis...!
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